Este miércoles colocará dos Ledes y una Lecer a enero y febrero de 2021, más un Boncer a 2022. El monto a colocar anunciado es de $75.000 millones, aunque puede ampliarse. En septiembre vencen $232.000 millones, el 75% en manos privadas. Buscan financiamiento neto

Se realizará este miércoles una licitación en la que buscará refinanciar un vencimiento por $70.000 millones y obtener fondos adicionales. Así, apunta a cubrir parte de déficit fiscal y extender el menor ritmo de emisión monetaria registrado en agosto.

Entre las 10 y las 15, la Secretaría de Finanzas, a cargo de Diego Bastourre, ofrecerá dos Letras a Descuento (Ledes) que vencen en 29 de enero y el 26 de febrero de 2021; una Letra ajustable por el coeficiente CER que acompaña la inflación (Lecer), con vencimiento también el 26 de febrero; y el Boncer que expira el 20 de septiembre de 2022 y paga CER más 1,3% anual (T2X2).

El volumen a colocar informado es de $75.000 millones, lo que ya adelanta la intención de hacerse de financiamiento adicional por sobre los $69.754 millones correspondientes a la Ledes que vence este viernes, el día que se liquidará la colocación. Sin embargo, el monto es ampiable hasta un máximo prefijado por Finanzas pero que no se da a conocer antes de la operación. De hecho, en las últimas licitaciones el mercado ofertó más de lo anunciado y el Gobierno amplió la emisión.

Economía busca continuar con la extensión de los plazos. Por caso, se trata de la primera colocación en la que ninguno de los títulos ofrecidos vence en 2020. Respecto de las tasas, los precios mínimos por cada $1.000 de valor nominal serán de $884,18 para la Ledes más corta, $860,74 para la nueva Ledes a febrero, $1.005,84 para la Lecer y $1.061,10 para el T2X2.

Tras haber reestructurado el 99% de la deuda en moneda extranjera bajo ley foránea y local, el Gobierno quiere sostener el alza en el financiamiento neto del Tesoro en el mercado de capitales en pesos. Es decir, colocar más deuda de la que vence para hacerse de recursos frescos. De esta forma, apunta a reducir gradualmente la dependencia de la emisión monetaria del Banco Central para cubrir el agujero fiscal récord generado por la coronacrisis, que cerraría 2020 arriba de los 7 puntos del PBI según las estimaciones del mercado.

En septiembre, los compromisos totalizan $232.353 millones, de acuerdo a un informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso. De ellos, alrededor del 75% está en manos privadas. Este mes hay tres licitaciones en moneda local programadas: la de esta semana y otras dos el miércoles 16 y el lunes 28.

Lo cierto es que el porcentaje de refinanciamiento de la deuda en pesos creció de forma progresiva en los últimos meses: en mayo por primera vez se logró patear el total de los vencimientos, con un roll over del 101%; en junio, ascendió al 108%; en julio, al 116%; y en agosto, al 123%. Esto permitió obtener unos $86.000 millones adicionales para el Tesoro el mes pasado.

Junto a una mejora en la recaudación respecto de los meses previos, eso generó un importante alivio para el Central, que pudo absorber más de $140.000 millones vía Leliq, Pases y venta de dólares para contener la tensión cambiaria.

Ese mismo desafío está planteado de cara al próximo año y se verá reflejado en el Presupuesto 2021, que el Ejecutivo enviará al Congreso el próximo martes. Tal como adelantó el ministro Martín Guzmán, el texto proyectará un déficit fiscal primario de 4,5% del PBI. Será al menos tres puntos menor al de este año producto de una mayor recaudación esperada y un recorte en parte del gasto volcado a paliar la coronacrisis, pero seguirá en un nivel elevado.

Al respecto, la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca Bocco, adelantó este lunes cómo planea cubrirse: «Tenemos un escenario equilibrado en el sentido que encontramos una manera de financiar los 4,5 puntos del PBI de déficit fiscal. Esperamos una recuperación en el nivel de actividad, que va a traccionar un aumento de la recaudación. Va a haber seguramente aportes por parte del Banco Central y colocación de deuda neta en pesos».