El Programa Nacional de Desarrollo de Proveedores asistió en 2020 a 81 proyectos industriales, apoyando inversiones productivas que sumaron 3.572 millones de pesos
El Ministerio de Desarrollo Productivo, a cargo de Matías Kulfas, destinó un total de 1.850 millones de pesos en 2020 para el Programa Nacional de Desarrollo de Proveedores, de acuerdo con un documento exclusivo al que accedió hoy BAE Negocios.
En dicho informe de balance anual, marcado por la ayuda económica en medio de la pandemia del coronavirus, la cartera de Desarrollo Productivo señala que «asistió en 2020 a 81 proyectos industriales, por 1.850 millones de pesos, apoyando inversiones productivas por 3.572 millones de pesos«.
Con el secretario de Industria, Ariel Schale, a la cabeza, «los proyectos asistidos por el programa van a tener impacto en ampliación de capacidad, mejora productiva, certificación de productos y procesos y optimización de la gestión empresarial», afirmaron las fuentes oficiales.
Para esto, se apoyaron inversiones en capital fijo, instrumental, moldes y matrices, ensayos, certificaciones, ampliación de planta, adquisición de software e implementación de industria 4.0, a la vez que se realizarán asistencias técnicas a las empresas mediante capacitaciones, incorporación de diseño y mejoras en las tecnologías de gestión.
El objetivo central del Programa Nacional de Desarrollo de Proveedores es promover inversiones en proveedores de bienes y servicios industriales de cadenas de valor estratégicas. Uno de los fines es generar capacidades locales que incrementen la competitividad y permitan sustituir importaciones y alcanzar mercados externos en bienes y servicios de alto valor agregado.
Rubros industriales
El desglose del programa ejecutado el año pasado muestra que el rubro «Energía renovable y no renovable» se llevó el primer puesto, con 687 milllones de pesos en aportes no reintegrables y 68 millones de pesos, en concepto de bonificación de tasa de interés.
En los sectores alcanzados, le siguieron la minería con 254 millones de pesos y 8 millones de pesos, respectivamente; Salud, 249 millones de pesos y 13 millones de pesos; y transporte y movilidad eléctrica, $170 millones y $18 millones.
Uno de los directivos de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la Argentina (Adimra), Aldo Costa, puntualizó que las firmas nucleadas en la cámara recibieron alrededor de 1.400 millones de pesos en 2020, siendo 62 empresas las que fueron beneficiadas por las medidas oficiales.
«Es un programa muy beneficioso, con aportes no reembolsables, bonificación de tasa y asistencia técnica», resumió Costa, quien destacó el carácter federal del programa de proveedores locales. Otros segmentos favorecidos fueron la industria ferroviaria, naval y aeroespacial.
Ahorro de dólares
El directivo apuntó que el desarrollo de empresas locales logra una mayor industrialización, una mejora de la matriz productiva, empresas más competitivas y sobre todo, la tan buscada sustitución de importaciones.
Kulfas, Schale y su equipo técnico también pretenden potenciar la capacidad exportadora de las empresas para generar divisas, en un contexto desafiante. El trabajo de las cámaras y firmas fue en buena medida con la Dirección Nacional de Compre Argentino y Programa de Desarrollo de Proveedores.
«Sabemos que se viene una segunda etapa del programa con mayores montos y por eso ya estamos dialogando desde diciembre», amplió Costa. En esta segunda parte, ingresarán las pequeñas y medianas empresas que no lo pudieron hacer antes, entre los meses de marzo y abril.
«Tenemos el total acompañamiento del Ministerio de Desarrollo Productivo. Es de reconocer la federalización del programa y la colaboración de Adimra con sus empresas asociadas para armar y presentar proyectos», dijo Costa.
Vaca Muerta
Otras fuentes industriales apuntaron que el plan oficial permitirá la sustitución de importaciones en bienes de capital como equipos para la industria petrolera, que también se podrían vender al exterior.
Asimismo, el directivo señaló que el plan ha motivado al sector a avanzar en la sustitución de compras al exterior de bienes de consumo y esto redundaría en un beneficio para la balanza comercial, en los segmentos de electrodomésticos y línea blanca. «La Argentina puede en su industria metalúrgica competir por diferenciación, no por volumen», aseguró.
El sistema de compras públicas se tiene que seguir profundizando, y hay que promover la sustitución de importaciones. En este sentido, plantearon que las compras públicas son dinamizadoras de la economía y alcanza niveles del 30% en las naciones más desarrolladas.