“Las presiones cambiarias y los probables ajustes tarifarios sumarían presiones en los meses venideros, y la inflación no perforaría el 3%, al menos, hasta marzo 2021”, agregó Rajnerman. “La suba en los combustibles, la liberación de ciertos precios pertenecientes al programa precios máximos, al igual que por un impulso en la recta final del mes en el precio de las carnes” impactó en el resultado del IPC de noviembre, explicó Milagros Suardi, economista de la consultora EcoGo.
Desde la firma LCG estiman una inflación entre 3,5% y 3,7%. Según su reporte, los alimentos presentaron una suba de 4% “de punta a punta” en noviembre. Impulsados, sobre todo, por los incrementos en la carne (6,6%). La tendencia, agregó, se mantuvo la primera semana de diciembre, cuando se registró un aumento del 0,9%.
La suba del IPC fue del 3,6% para los analistas consultados en el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central. Además, proyectaron que la inflación de diciembre será del 4%, con lo que alcanzará un promedio anual de 36,7% en 2020. De cara a los primeros meses del año próximo, estimaron una inflación de 4,1% para enero, 3,8% en febrero, 4% en marzo y 3,5% en abril. En ese sentido, elevaron sus pronósticos para 2021, cuando llegaría al 50%.
Para la consultora Orlando Ferreres, en tanto, la inflación durante noviembre fue del 3%, con un crecimiento interanual de 35,3%. “En cuanto a los principales rubros, ‘Indumentaria’ encabezó las subas del mes, registrando un alza de 6,8% mensual. Por su parte, ‘Alimentos y bebidas’ lo hizo en 2,1% mensual”, detalló.