La entidad elaboró un informe en donde alerta sobre 500 retiros anticipados que generaron casi $5.000 millones. La investigación se presentó ante la OA, Procuración General de la Nación y a la Procuración del Tesoro de la Nación.
«La decisión de los retiros de los más de 500 funcionarios del BNA, entre altos gerentes, jefes y otros responsables de distintas áreas de negocios, generó un importante impacto económico, pero afectó también la capacidad de gestión operativa», sostuvo el presidente del Banco Nación, Eduardo Hecker, en un comunicado.
El informe fue elaborado por el Síndico del BNA para la Sindicatura General de la Nación y complementado con datos que recolectó la actual gestión del banco.
El documento plantea objeciones a la falta de fundamento y motivación del proceso de retiros anticipados -que incumplió las pautas para su instrumentación- así como la consideración de alternativas más convenientes para el banco y el no haber cumplido con la ley de procedimientos administrativos.
También fueron detectadas otras supuestas irregularidades, como la modificación de los requisitos de edad establecida para acceder al beneficio, las pautas establecidas para la determinación de la gratificación de pago único y el multiplicador adicional aplicable exclusivamente al Gerente General y a los Subgerentes generales.
El documento fue presentado tanto a la Oficina Anticorrupción, a la Procuración General de la Nación y a la Procuración del Tesoro de la Nación.
