Fueron 149.000 entre marzo, abril y mayo, contra 152.000 el año pasado. El impacto de la pandemia fue menor que el observado en otros países.

El trabajo registrado en la Argentina no fue ajeno a los daños que provocó la pandemia, aunque resultó afectado en menor medida que en un amplio número de países, entre los que se encuentran Canadá, Estados Unidos, Brasil y Chile, e incluso menos perjudicado que en 2019, el peor año para los asalariados en relación de dependencia del sector privado desde 2009.

Con una cuarentena estricta en abril, donde apenas el 43% de la economía del país estuvo activa, la destrucción del empleo formal fue letal ese mes (-1,7%) y también bastante significativa en marzo (-0,7%). No obstante, en mayo prácticamente no hubo variaciones en los puestos laborales de los trabajadores privados (-0,1%) y en junio la tendencia muestra una reversión en positivo.