Así lo asegura un análisis del Centro de Economía Política Argentina (CEPA).
Para el CEPA, lo que se percibe mensualmente de la AUH (80%) sólo supera la canasta para los casos de niños de cero y un año -10,4% de la población menor de 18 años-, y en los de adolescentes de 17 años sólo de 41% a 55%.
Dados los mayores requerimientos nutricionales de los adolescentes varones, la brecha con la AUH para un varón de 17 años es de $3.224, mientras que para una mujer de la misma edad es de $1.814, aunque también significativa.
El informe destacó que en un contexto de aumento del desempleo y caída del poder adquisitivo de los sectores de ingresos medios, quienes típicamente generan las «changas» que emplean a los sectores de bajos ingresos, «la insuficiencia de la AUH en términos alimentarios se vuelve un problema significativamente más acuciante».
«Estos hogares pasan a depender casi exclusivamente de estas transferencias que representan el único ingreso estable del hogar», resaltó el informe.
Además, completó, la canasta alimentaria «no incluye otros bienes también básicos e indispensables, como pañales en los bebes de cero a dos años, los elementos de gestión menstrual en las adolescentes a partir de los 11 o 12 años o los elementos de la canasta escolar para los niños, niñas y adolescentes».